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Presentación


Bienvenidas/os al Blog de "Psicoanálisis II".
 
Este Blog tiene por objetivo convertirse en una herramienta de trabajo epistémico, a disposición de todas/os los estudiantes de la materia y de la amplia comunidad universitaria de la Facultad de Psicología de la UNR.
También, es una puerta abierta a quien se interese por el Psicoanálisis y sus elaboraciones clínicas, epistémicas y políticas.
Encontrarán, aquí, contenidos que son propios de "Psicoanálisis II", como también textos y entrevistas que destacan los puntos candentes del Psicoanálisis en el siglo XXI.
 
En cuanto al Programa de "Psicoanálisis II", el eje fundamental está situado en el concepto de "síntoma". Resulta un articulador de muchos otros conceptos y una clave de lectura para orientarse en la formación psicoanalítica como, también, para no convertir al Psicoanálisis en una cosmovisión vulgar de la existencia ni en un manual de autoayuda, que indique cómo consentir, ingenuamente, a la ilusión de un confort ideal, sin inconsciente.
 
El "síntoma", concepto que tanto Freud como Lacan mantuvieron permanentemente, hace que el estudiante de Psicoanálisis y el practicante del Psicoanálisis, deban tomar una posición epistémica, clínica y política al respecto. Según cómo se conceptualice al síntoma, se pensará la clínica psicoanalítica, pero también se concebirá la existencia humana y se podrán leerán algunos de los fenómenos sociales, particularmente del siglo XXI.
 
El estudio del Psicoanálisis, tal como lo han formulado Sigmund Freud y Jacques Lacan, implica una particular manera de relación al saber, un modo de elaboración epistémica que conlleva siempre un núcleo resistencial, propio del "no quiero saber nada de eso". 
La dificultad para el estudio y comprensión del Psicoanálisis no ocurre sólo por dificultades intelectuales, sino por poderosas resistencias que se oponen a saber sobre "eso". 
Estudiar Psicoanálisis implica siempre, en cualquier nivel, que el sujeto se enfrente a una tarea difícil y, para la cual, debe tener el valor de usar su habilidad para elaborar ("sapere aude"), para comprender, para captar algo del sentido de aquello que está estudiando.
"Sapere aude", expresión latina acuñada por el poeta satírico Horacio (65 aC-8 aC), que encontramos en la carta escrita a su amigo Lolius (Epístola II del Epistularum liber primus), cuando se refiere a las muchas estrategias que usó Ulises frente a las pruebas impuestas en su regreso de Troya. Allí se puede significar ese "sapere aude" como: "tener el valor de usar tu habilidad para pensar".
No nos olvidemos que "sapere aude" es la fórmula que incluye I. Kant en su ensayo "¿Qué es la ilustración?" (1784), texto que siempre es un gusto volver a leer e invitar a hacerlo.
"Sapere aude" es traducida más frecuentemente como "atrévete a saber". Es, justamente, la invitación que formula, en su enunciación, el psicoanalista en su práctica clínica.
También es la fórmula que habita a quien desea enseñar algo del Psicoanálisis, en un tono de alegre-saber y disposición libidinalmente viva. También es de esperar que habite en quien desea enseñar, para aplicar ante todo a su propia posición.
 
Todo el equipo de la cátedra les desea un estimulante recorrido por este espacio, topológico, por cierto, que se reconoce deudor de las enseñanzas de Sigmund Freud y de Jacques Lacan. 
Los invitamos a un atrevimiento intelectual, a desafiar los límites de aquello que cada uno puede inteligir, que cada uno puede comprender y elaborar, para generar una relación al saber, a lo que queda siempre por saber, que implique una profunda alegría y una agradable satisfacción.
 
Roberto Bertholet
Profesor Titular de "Psicoanálisis II"
Facultad de Psicología
Universidad Nacional de Rosario